A finales del siglo XIX de la mano de Johan Friedrich Miescher, un médico suizo, se descubrieron los ácidos nucleicos, los cuales establecen el material genético de los seres vivos y son imprescindibles para guardar y expresar la información genética. Desde el punto de vista químico se definen como las macromoléculas formadas por polímeros denominados nucleótidos, los cuales están enlazados a través enlaces fosfodiéster.
Hay dos tipos de ácidos nucleicos química y estructuralmente distintos:
- ADN: este ácido nucleico almacena información para construir otros componentes de las células.
- ARN: este ácido nucleico se encarga de los pasos intermedios entre la información del ADN y la síntesis de las proteínas.
A continuación vamos a explicar de forma más detenida los dos tipos de ácidos nucleicos: el ácido desoxirribonucleico y el ácido ribonucleico.
Tipo de ácido nucleico: ADN
El ácido desoxirribonucleico, también conocido por las siglas ADN, no se encuentra disperso en las células de los seres vivos, más bien se encuentra empaquetado en los cromosomas. Cada hebra está formada por la alternancia de un azúcar y un grupo fosfato, teniendo en cuenta que en cada azúcar hay anclada 4 bases nitrogenadas: adenina, timina, guanina y citosina.
El ADN no solo tiene como función suministrar la información genética que determina a cada ser vivo, por eso vamos a explicarlas a continuación.
- Replicación: es capaz de que se múltiple de forma idéntica que permite que la información genética pase de madre a hija.
- Codificación: cada gen contiene información para la producción de una proteína y que cumpla una función en concreta.
- Metabolismo celular: actúa en el control del metabolismo celular, es decir, a suma de todos los cambios químicos que tienen lugar en la célula.
- Mutación: la evolución como especie está determinada por la mutación del ADN, es decir, los cambios que surgen en la cadena del ácido desoxirribonucleico que se pueden heredar.
Tipo de ácido nucleico: ARN
El ácido ribonucleico, también conocido por las siglas ARN, es fundamental para la vida al encargarse de ciertas tareas como la síntesis de proteínas o la herencia genética. Está presente tanto en las células procariotas como en las eucariotas, concretamente en mitocondrias, cloroplastos y ribosomas.
Es importante señalar que el ácido ribonucleico se puede hallar en algunos tipos de virus, por ejemplo, virus ARN.
Está formado por una cadena simple de monómeros repetitivos conocidos como nucleótidos formados a su vez por un azúcar (ribosa), un fosfato y las 4 bases nitrogenadas, en este caso cambiando la timina por el uracilo.
Las funciones se explican mejor teniendo en cuenta los tipos de ARN que existen.
- ARNm o ARN mensajero: posee la información necesaria para formar proteínas y llevarlas al núcleo de la propia célula para su elaboración.
- ARNt o ARN de transferencia: cumple la función de transportar los aminoácidos a los ribosomas para su síntesis.
- ARNr o ARN ribosómico: se centra en formar el armazón de los ribosomas y asociarlas a proteínas específicas una vez las han leído.