El término cartel se define como una lámina de papel u otro material que se puede colocar en ciertos lugares como un centro comercial, una empresa o la propia vía pública con el objetivo de informar sobre algún tema en particular o publicitar algún producto o servicio. También sirve para promocionar cualquier actividad cultural, política o deportiva con gran afluencia de público, por ejemplo, partidos de baloncesto, festivales y recitales.
A partir de la segunda mitad del siglo XIX, esta lámina ha sido muy importante al no existir aún medios de comunicación como la televisión o la radio, entonces se colocaba en los carruajes y en los escaparates de algunos comercios para atraer al consumidor.
Si deseas saber los tipos de carteles que existen, te aconsejamos que sigas leyendo este artículo.
Cartel informativo
El cartel informativo, como su propio nombre indica, es el que tiene como función principal informar sobre algo en concreto, ya sea un evento, curso, reunión social o espectáculo, entre otras cosas. Lo más habitual es que se presente solo con texto, pero a su vez se recomienda que las letras sean grandes y que el color contraste con el fondo para que llame mucho más la atención.
Cartel formativo
El cartel formativo es el instrumento que sirve para difundir y adherir el mensaje en quien lo recibe con el objetivo de provocar alguna especie de reacción. Este tipo de cartel sirve para moldear la actitud en ciertos establecimientos respecto a los hábitos de salud, higiene, limpieza y seguridad. En este caso la imagen predomina sobre el texto, el cual es corto y da énfasis a la idea sugerida.
Cartel publicitario
El cartel publicitario se caracteriza por tener la capacidad de influir en los patrones de consumo de los individuos y divulgar ciertos servicios y/ productos, es decir, aquel que forma parte de la propaganda. Aquí tenemos como ejemplo el cartel que anuncia un viaje por el sur de Italia o que muestra el nuevo producto de Apple.
Cartel normativo
El cartel normativo se llama así porque la finalidad principal es tener una gran influencia en el lector para hacerlo según las normativas que hay en el lugar o para inculcar conocimientos sobre alguna ley. Este tipo de cartel tiene como ejemplo una biblioteca que obliga a estar en silencio.
Cartel artístico o decorativo
El cartel artístico o decorativo no tiene como finalidad informar acerca de algo, más bien debe resultar ser armonioso, hermoso o documental.
Esto quiere decir que se centra más en la estética para atraer a las personas, por lo que ha perdido su función publicitaria para pasar a ser un medio de canalización de ideas y sensaciones intelectuales.
Cartel de protesta
El cartel de protesta se elabora para que se forme una agitación social o política, esto tiene que ver con el que llevan los que se manifiestan por algún tema en concreto. Lo que pretende el diseñador es llegar al público de manera que estos se unan a ese sentimiento por una causa totalmente justa.