El concepto tribu urbana tiene origen en el siglo XX, momento en el que las ciudades más grandes comenzaron a ser más conocidas por la expansión de las sub-culturas entre los más jóvenes, como es el caso de los hippies o los punks, quienes tenían otra forma de pensar. Este fenómeno provocó que diversas personas se identificasen con otras por la forma de vestir, el lenguaje propio y, en general, unos hábitos y gustos de consumo muy similares.
Estos sectores concretos de las sub-culturas son identidades compartidas de manera grupal, los cuales tienen como denominador común la rebeldía y la marginación social, teniendo en cuenta que respetan las tradiciones y los valores de la cultura más predominante.