La oratoria no solo se trata del mero hecho de hablar otros, esto involucra una agrupación de técnicas y normas que son fundamentales para expresarse de una forma clara, sencilla, fluida y contundente frente a un público numeroso con la finalidad de intentar transmitir un mensaje sin miedo o desconfianza y con desenvoltura para conmover a quienes oyen. Algunas de las cualidades para tener una buena oratoria son el conocimiento sobre sí mismo, la personalidad potente para ser más seguro, la creatividad para crear discursos claros pero con un “push” y conocer al público al que se dirige para saber cómo actuar.
Algunos de los objetivos más importantes de la oratoria son los siguientes:
- Tener un vocabulario adecuado para cada situación.
- Expresarse de la mejor manera para convencer al público.
- Lograr el timing (organizar, planificar y desarrollar) adecuado en el discurso.
- Superar el bloqueo que genera el pánico escénico.