En botánica se define a la semilla como un grano contenido en el interior de las plantas espermatófitas, que tiene en su interior el embrión que, bajo circunstancias favorables, germinan y dan origen a una nueva planta de la misma especie. Se trata de una pepita con tejido nutricional o no que está recubierta por una capa que la protege, la cual se conoce como episperma o tegumento seminal.
Este tipo de grano es de gran relevancia para la alimentación y, por este motivo, el ser humano se encarga de desarrollar un proceso productivo que incluye los siguientes pasos: siembra, cosecha, secado, lavado, selección, tratamiento, almacenaje y embalaje.