El tejido de animal se define como un material natural que está formado por una agrupación de células bien organizadas, repartidas de manera uniforme y con una raíz embrionaria común. Las células de cualquier tejido tienen una o más funciones en concreto y se relacionan entre sí directamente o a través de las moléculas que conforman la matriz extracelular.
El tejido de animal es un conjunto de células especializadas que actúan en forma de bloque para poder producir los diferentes órganos de un organismo y éstos a su vez se engloban en sistemas.
Los tejidos más destacados por su diseño y estructura son el epitelial, el muscular, el nervioso y el conectivo, y a continuación se explican detenidamente.
Tejido epitelial
El tejido epitelial es aquel que se encuentra sobre los amontonamientos yacentes al tejido conectivo y se origina mediante las distintas capas de células que están conectadas entre sí tapando cualquier hueco libre. De esta forma crea el revestimiento interior de las cavidades y órganos huecos, además de producir glándulas y mucosas.
Las funciones más destacadas son:
- Sirve para proteger los órganos, luchar contra la entrada de microorganismos y controlar la pérdida de H2O.
- Secreta distintas sustancias, ya sean hidrofílicas, lipofílicas o ambas.
- Los enterocitos que son células epiteliales se encargan de ingerir diversos nutrientes esenciales.
Tejido muscular
El tejido muscular lo conforma el 42,5% de la masa del cuerpo y se centra en la contracción, lo que favorece a que los órganos se pueden mover. Se forma mediante la agrupación de células que con una forma fusiforme que se pueden cambiar por la presencia de una estructura contráctil que pasa por las células del tejido muscular.
Las funciones más destacadas son:
- Se encarga de cualquier tipo de movimiento voluntario de las extremidades, del tronco y de la cara.
- Contrae los músculos que están en el esófago, el intestino y el estómago que son los que permiten la trituración del alimento.
- El músculo cardíaco permite que el corazón realice unos movimientos para impulsar la sangre.
Tejido nervioso
Se conforma con multitud de neuronas lo que causa que haya interconexiones para formar un sistema que tiene la capacidad de remitir información de una célula a otra. El tejido nervioso es aquel que surge en la capa más externa del embrión que se llama ectodermo y se centra en detectar ciertos estímulos para poder modificarlos en impulsos nerviosos.
Las funciones más destacadas son:
- Es capaz de retener toda la información que proviene de receptores sensoriales.
- Procesa esa información para generar un sistema esencial de retención de conocimientos.
- Produce las señales necesarias que tienen que llegar a las células efectoras, las cuales actúan frente a los antígenos.
Tejido conectivo
El tejido conectivo o conjuntivo es aquel en el que hay una gran variedad de células que tienen como función principal completar los huecos libres que hay entre los órganos y los otros tejidos.
Las funciones más destacadas son:
- Participa en la adhesión o desunión de los elementos tisulares que forman todos los órganos y sistemas.
- Sirve como medio logístico para repartir los paquetes vásculo-nerviosos.
- Transporta las sustancias de desecho y también nutritivas.