La necesidad de trabajar quizás tuvo su origen hace miles de años cuando el ser humano tenía que sobrevivir, momento en el que tuvo que usar todas sus habilidades para obtener alimentos, confeccionar su vestimenta, elaborar utensilios y hacer su propio hogar con los materiales que iba encontrando. Entonces, gracias al trabajo y el esfuerzo, el ser humano ha conseguido obtener su propio espacio, lograr la riqueza material y ser respetado por los demás, lo que conlleva a aumentar la satisfacción personal y profesional.
Es cierto que el concepto de trabajo se puede analizar desde un punto de vista económico, filosófico o físico, pero a modo general se define como una agrupación de actividades que se realizan con la finalidad de lograr una meta, solucionar un problema o producir bienes y servicios.
Si quieres saber cuáles son los tipos de trabajos que existen debes continuar leyendo, ya que los clasificamos en función de la herramienta principal y de la cualificación necesaria.
Trabajo en función de la herramienta principal
La primera clasificación está relacionada con la herramienta principal a usar en el trabajo.
Trabajo manual
El trabajo manual es el que se realiza con las propias manos, por eso se conoce como el más antiguo, ya que comenzó mucho antes de la revolución industrial. Aquí podemos añadir a mecánicos, albañiles, pintores, artesanos y escultores.
Trabajo intelectual
El trabajo intelectual es la actividad mental que se materializa para hallar algunas solución a un problema en concreto. Por eso se conoce como trabajo personal, ya que depende de la propia persona al necesitar aptitudes relacionadas con el procesamiento de la información.
También hay otros aspectos muy importantes como la organización, la disciplina, la constancia y la motivación. Aquí podemos englobar a los profesores, los arquitectos y los empresarios.
Trabajo en función de la cualificación necesaria
La segunda clasificación está vinculada a la cualificación para acceder al trabajo y hacer un buen desempeño.
Trabajo poco cualificado
El trabajo poco cualificado es aquel en el que el individuo no tiene que tener un mínimo de estudios o conocimientos, por lo que engloba tareas más mecánicas con un nivel de exigencia intelectual mucho menor. En este tipo de trabajo se engloba a camareros, personal de limpieza y dependientes de ropa y muebles, entre otros.
Trabajo semi-cualificado
En el trabajo semi-cualificado se realizan tareas sencillas que, aunque sean repetitivas, necesitan de un grado de habilidad y experiencia para su correcto desarrollo.
Es cierto que los conocimientos no son muy específicos, por eso de este tipo de trabajo forman parte los chóferes, operarios de maquinaria, azafatas de vuelo y esteticistas.
Trabajo cualificado
El trabajo cualificado es aquel en el que es necesario tener una formación académica y profesional para realizar de forma adecuada las labores que se indican en dicho trabajo, teniendo en cuenta que se necesitan unos conocimientos para optar a este puesto. En este caso tenemos a enfermeros, farmacéuticos, ingenieros, abogados. directoras de cine, diseñadores de moda, arqueólogas y matemáticos.